jugando al doctor

La semana pasada hubo gran polémica por el caso de Natalia, una niña de 14 años que “jugando” con unos “conocidos”, fue grabada con la cámara de un celular mientras le hacía sexo oral a otro niño de una edad similar y que luego aparece mientras el otro niño le lame uno de sus senos.
El tema ha bastado para llenar cientos de blogs, foros y páginas en Internet. A la niña que se hizo famosa le cagaron la vida, la expulsaron del colegio, no sale de su casa, y debe escuchar como todos hablan de su vida.
Eso da para opinar mucho, pero quiero opinar de algo un poco anterior al hecho mismo que hoy todos comentan.
Quiero hablar de la educación sexual.
Escuché una entrevista a la niña que al parecer es real.
En ella le preguntan porque lo hizo. Dice que había tomado un poco, y que esos niños ni siquiera eran amigos, mas bien eran conocidos. Explica que lo que hacían era “leseo”, que ellos la retaron a hacerlo, ella se picó y comenzó como un juego a simular que lo hacía, y de a poco la cosa fue subiendo de tono hasta el resultado que todos conocemos.

Los “juegos sexuales” en niños no son cosa nueva. Siempre se ha hablado de “jugar al doctor” o similares.
Incluso e escuchado que estos “juegos” son producto de una curiosidad natural que aparece en esa etapa.
La diferencia es que la sociedad ha cambiado, y lo que antes era jugar a ser un doctor que miraba en lugares prohibidos, ahora con el acceso fácil a contenidos eróticos se ha transformado en conductas derechamente sexuales.

Pero ¿Por qué esta curiosidad?, uno siente curiosidad por lo que no conoce.
Me pregunto, si esta niña hubiera tenido claro lo que estaba haciendo, si hubiese tenido claras las implicancias de sus actos, si hubiese conocido las enfermedades que podía contagiarse…¿habría hecho lo que hizo?

Está bien, pueden pensar que ella sabia lo que hacia, que no es que el cabro se bajo el cierre y ella haya pensado “¿que será eso?, voy a ver que sabor tiene”. Pero hay una diferencia entre saber de algo y conocerlo realmente.
Estos niños seguramente vieron mas de un video porno, seguramente sabían lo que era un “chupada” por comentarios de amigos, pero no creo que realmente tuvieran un conocimiento de lo que realmente significaba.

Y aquí es donde entra la educación.
Si para estos niños la sexualidad no hubiese sido vista como un taboo, como algo prohibido, si desde chicos hubieran convivido con la sexualidad como con la odontología, no habrían hecho lo que hicieron. Porque no habría sido ni un acto de rebeldía haciendo algo prohibido.
Ellos habrían sabido que no se anda pasando la lengua por el sexo de otros, por las enfermedades, por lo que el otro siente y por último porque ese es un regalo que le puedes hacer a alguien que amas y no a cualquiera que de desafíe a hacerlo.

La educación sexual es algo que debe estar presente desde siempre.
Señora, si su hija sabe que los hombres tienen pene no se le va a convertir en una pecadora. Al contrario, para ella va a ser natural que los hombres tengan pene y va a poder manejar mejor el tema cuando algún jote intente engrupirsela.
La mayor arma de los pedófilos es la ignorancia de los niños. Les hacen creer que están jugando, y si los niños no tienen la educación para saber lo que realmente está pasando, creen que realmente es un juego.

Por eso vuelvo a decir, falta educación sexual, todo sería mas sano si los conservadores dejaran de ver maldad donde no lo hay y dejaran que el sexo fuera un tema natural.